COL: El precio de la Feria

La Feria Nacional de San Marcos es uno de los eventos más importantes y emblemáticos de Aguascalientes. Cada año, miles de visitantes acuden a disfrutar de la música, la gastronomía, la cultura y la diversión que ofrece esta verbena. Sin embargo, detrás de la fiesta hay un costo que no todos están dispuestos a pagar: el de la imagen urbana.

El Municipio de Aguascalientes, a través de la Secretaría de Desarrollo Urbano, ha clausurado siete anuncios espectaculares que se ubican dentro del perímetro de la feria y que mantenían adeudos de años anteriores1. Estos anuncios, además de representar una evasión fiscal, generan una contaminación visual que afecta al paisaje urbano y al patrimonio histórico y cultural de la ciudad.

La Ley de Ingresos del Municipio de Aguascalientes establece que los anuncios espectaculares deben contar con una licencia y pagar los derechos correspondientes por su instalación y funcionamiento1. Sin embargo, muchas empresas incumplen con esta normativa y se aprovechan de la falta de vigilancia y sanción por parte de las autoridades.

Esta situación no solo perjudica al erario público, sino también a los ciudadanos, que tienen que soportar una invasión publicitaria que atenta contra su derecho a un ambiente sano y agradable. Los anuncios espectaculares no solo generan ruido y luz artificial, sino que también pueden provocar accidentes por su mal estado o ubicación.

La Feria Nacional de San Marcos es una oportunidad para mostrar al mundo lo mejor de Aguascalientes, pero también para cuidar y respetar su entorno. La imagen urbana es un reflejo de la identidad y el orgullo de los habitantes de una ciudad. Por eso, es necesario que el Municipio de Aguascalientes haga cumplir la ley y garantice que los anuncios espectaculares se ajusten a los criterios estéticos, técnicos y legales que se requieren.

La Feria Nacional de San Marcos es una fiesta para todos, pero no a costa de todos. Los anunciantes deben ser responsables y solidarios con la ciudad que los acoge y les brinda un espacio para promocionar sus productos o servicios. Los ciudadanos deben ser conscientes y exigentes con el respeto a su patrimonio y a su calidad de vida. Y las autoridades deben ser eficaces y transparentes en el ejercicio de sus funciones.

Solo así podremos disfrutar plenamente de la Feria Nacional de San Marcos sin renunciar a la imagen urbana que merecemos.

The price of the Fair

The National Fair of San Marcos is one of the most important and emblematic events of Aguascalientes. Every year, thousands of visitors come to enjoy the music, gastronomy, culture and fun that this festival offers. However, behind the party there is a cost that not everyone is willing to pay: that of the urban image.

The Municipality of Aguascalientes, through the Secretariat of Urban Development, has closed seven billboards that are located within the perimeter of the fair and that had debts from previous years. These billboards, in addition to representing tax evasion, generate visual pollution that affects the urban landscape and the historical and cultural heritage of the city.

The Income Law of the Municipality of Aguascalientes establishes that billboards must have a license and pay the corresponding rights for their installation and operation. However, many companies do not comply with this regulation and take advantage of the lack of surveillance and sanction by the authorities.

This situation not only harms the public treasury, but also the citizens, who have to endure an advertising invasion that violates their right to a healthy and pleasant environment. Billboards not only generate noise and artificial light, but also can cause accidents due to their poor condition or location.

The National Fair of San Marcos is an opportunity to show the world the best of Aguascalientes, but also to take care of and respect its surroundings. The urban image is a reflection of the identity and pride of the inhabitants of a city. Therefore, it is necessary that the Municipality of Aguascalientes enforce the law and ensure that billboards comply with the aesthetic, technical and legal criteria that are required.

The National Fair of San Marcos is a party for everyone, but not at the expense of everyone. Advertisers must be responsible and supportive with the city that welcomes them and provides them with a space to promote their products or services. Citizens must be aware and demanding with respect for their heritage and their quality of life. And the authorities must be effective and transparent in the exercise of their functions.

Only in this way can we fully enjoy the National Fair of San Marcos without giving up the urban image that we deserve.