CRITICA MITOS Y LEYENDAS 2024: PESADILLAS LEGENDARIAS 2024. Por Andrés Vancook

En Aguascalientes tenemos la fortuna de contar no solo con un gran talento artístico, sino también con el apoyo de los gobiernos y municipios que impulsan la creatividad y el desarrollo cultural en múltiples expresiones.

Un excelente ejemplo es el concurso anual que organiza el Municipio Capital para que una propuesta teatral se realice en el Panteón de la Cruz durante los meses de octubre y noviembre, conmemorando el Día de Muertos, Halloween y el folclor que embellece nuestras calles en esta temporada.

Atravesar un panteón siempre es una experiencia enigmática, una pregunta viva sobre lo que hay después de la muerte. Para iniciar destaco la limpieza del panteón y que no había mosquitos, lo que me dice que se fumigó el área y se cuidaron los detalles para el evento.

Desde ese punto parte la obra de teatro Pesadillas Legendarias. Este 2024, Anónimo Teatro, bajo la dirección de David Nava, nos ha traído más de 100 funciones en los Panteones de la Cruz y de Los Ángeles. Tuve la oportunidad de presenciar el primer recorrido de la noche, y quedé impactado por la fuerza y energía del actor principal. Lo primero que pensé fue: "¿Cómo logra mantener esos gritos noche tras noche?"

A medida que avanzaba en el recorrido, me fui sumergiendo en el guion, que percibí como inteligente y bien interpretado desde el inicio. Los personajes que descubrí tenían roles claros y bien definidos, logrando dar vida a seres mitológicos y figuras de la cultura popular. Las historias se desarrollaban de forma orgánica entre las tumbas, sin nada improvisado, y guiaban a un grupo de cien espectadores a través de pasillos estrechos, acompañados de los efectos sonoros de golpes y gritos, que nos llevaban de un acto al siguiente.

Quiero destacar el manejo del traslado de los espectadores, que nos mantenía inmersos en la narrativa de la historia, sin dejar espacio para pensar en dónde estábamos, sino siempre atentos al próximo acto. Tanto los actores como las actrices demostraron una gran capacidad al interpretar un guion largo y complejo, lleno de palabras retadoras. Aunque presencié probablemente la función número cien, la naturalidad y entrega en la interpretación son mérito tanto del elenco como de la dirección de Nava.

He asistido a este evento en años anteriores, y aunque es difícil hacer comparaciones dada la constancia del escenario, debo resaltar los colores y la intensidad en la actuación, que lograron atraparme por completo. En algunos momentos, la crudeza de las palabras me sacaba del contexto y me llevaba a reflexionar sobre la fragilidad y la intensidad de la vida. Un actor, sin tapujos, lanzaba verdades dolorosas que resonaban con nuestras luchas como sociedad, esculpiendo en cada escena las debilidades a las que todos nos enfrentamos.

Mover a cien personas sin perder el control y lograr ambientar esos espacios oscuros con humo y proyecciones es un verdadero logro. Destaco la energía y entrega de las actuaciones, ya que mantener esa intensidad cada noche debe ser agotador. También hubo toques de humor que, si bien a mi parecer son innecesarios en este tipo de espectáculos, entiendo que buscan darle un respiro al espectador. Fue una hora de recorrido que me mantuvo interesado.

En el entretenimiento popular de terror, a menudo se espera lo fácil, lo rápido, el susto inmediato, pero esto puede hacer que pasemos por alto el contenido profundo de la obra. En resumen, muchos buscan el "susto fácil", cuando la obra tiene mucho más que ofrecer.

Con Pesadillas Legendarias, miles de hidrocálidos disfrutaron de un espectáculo esperado año con año en este escenario único. Imagino que los actores necesitarán mucho té con miel para recuperar esas gargantas, desgastadas tras romper el silencio del panteón. En conclusión, califico esta obra como una experiencia muy atractiva, interesante, bien dirigida, interpretada con esmero y pasión, y producida con pálpito energético en un lugar donde los corazones ya no palpitan.